La verdad es que siempre está esa persona. Esa persona por la que crees que lo darías todo. Esa persona que te hace olvidar todo lo malo por un instante y te hace sentir como nadie ni nada nunca te ha hecho sentir, os entendéis sólo con miraros y cuando estáis juntos es el momento perfecto con la persona perfecta. Todas estas cosas hacen, por lo general, que cuando esa persona no está a tu lado la eches de menos hasta extremos inimaginables, tanto que harías lo que fuera por estar en ese momento a su lado y no separarte nunca de ella. La verdad es que cuando encuentras a ese alguien sabes de sobra que es él, si te entran dudas, ¡Mala suerte! Sigue buscando. Yo no me arrepiento de haberme enamorado, aunque sólo lo haya hecho y vivido una vez, no me hace falta que sean más, vivo a gusto así, tengo todo lo que quiero y él me completa y me da lo que me falta... El mundo se para cuando estoy a su lado pero por desgracia el tiempo no. Es más, vuela, nunca antes una hora real se me había hecho tan corta como al estar con él, parecían tan solo diez minutos. Siento que quiero hacer demasiadas cosas con él que no sé si una vida entera será suficiente, quiero vivir esta sensación todos los días de mi vida, cada vez que me despierte y le vea a mi lado podré decir orgullosa que desde un principio sabía perfectamente que era él. Era eso lo que quería: saber que era él y no tener dudas. Y es precisamente como me siento ahora mismo y me sentiré toda la vida.
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