Fuimos algo y ya no hay na. Te reclamo y te escribo, soy un mendigo por tu culpa. Te marchaste y te dio igual que llorara, que sufriera por no besarte más. Y ahora pregunto que si volverás para escaparme de esta soledad que me ahoga, que me ahoga. Y sigo preso, me siento vacío, solo hay frío sin tus besos, siento escalofríos en cada uno de mis huesos, ya no hay retroceso, hasta he perdido peso, el dolor se hace inmenso. Lloro y lo pienso, hace más de un mes que por tu piel ya no descanso, pienso en que te marchas y el daño se me hace inmenso. Todo está denso sin tu boca y todo eso, me siento preso. Y tú eres la que me hace estar así, perdido en estas calles que huelen a ti. No te puedo olvidar, no puedo seguir, si no te tengo cerca no quiero vivir. Y tú eres la que me hace estar así, perdido en estas calles que huelen a ti. No te puedo olvidar, no puedo seguir, si no te tengo cerca no quiero vivir. Porque ojalá fuese tan fácil olvidarte como lo fue enamorarme de ti, puedes mentirme pero sé que por las noches te acuerdas de mí. Pienso en tu cuerpo y en mi cama, que no volveré a verte. Que hay amores que vienen y van haciéndote fuerte. Que a lo mejor sonrío, con un poco de suerte, el día que supere que ya no puedo tenerte. Cariño, no te olvido, siempre estás en mi mente. Pues tú dabas sentido a mis delirios más dementes. Sacabas mi sonrisa como hace poca gente, estabas siempre pa apoyarme y eso es más que suficiente. Tengo los ojos rojos y el corazón roto y te juro que me destroza pensar que ahora estás con otro. Que tus besos son para él y que ya no existe el nosotros, que ahora otro roza tu piel y te come poquito a poco. Quiero tenerte pero te has ido, mis sábanas te anhelan, pues saben que te he perdido. Busco el consuelo recordando lo vivido, pensando que aunque no estés, al menos podré ser tu amigo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario